jueves, 13 de junio de 2013

Lo que resta del año 2013 en cine

Estamos a mitad de año, de modo que toca hacer un repaso al cine que viene.

Seguiré un orden cronológico de las cosas que no me quiero perder este año. Para comenzar, el día 7 de julio se estrena Star Trek: En la oscuridad. Personalmente, nunca me ha llamado mucho la atención el universo de Star Trek (seguro que es porque nunca me he puesto a ello), pero esta película la he metido en mi lista de imprescindibles desde que vi el tráiler en el cine. ¿La razón? No, no es J. J. Abrahams, sino Benedict Cumberbatch. No puedo evitarlo, desde que lo vi en el papel de Sherlock Holmes, me he convertido en fan de este actor. Además, en esta película hace de antagonista y, como todo buen villano, lleva un abrigo que parece una capa. Parecen razones tontas, pero un buen villano con capa es un buen motivo para ver una película.


El 26 del mismo mes se estrenará Lobezno inmortal, la segunda de la saga de Lobezno. Este personaje merece una saga aparte y así lo vieron los productores. En esta ocasión, Lobezno va a tener muchos problemas con sus poderes y el argumento no llama mucho la atención pero… ¡¡Es Lobezno!! Y además, transcurre en Japón. Toda película de superhéroe que transcurra en Japón debe estar en la lista de imprescindibles (espero que no destrocen el país como hicieron en Resident Evil).


Y, como tiene razón con Lobezno, voy a hablar de otra película que también está por venir aunque no tenga fecha prevista porque están en fase de rodaje. Se trata de la secuela de X-men Primera generación. Ya hemos podido alguna imagen de adelanto y aquí os dejo una para delicia de pro-mutantes.


 Después de eso tendré que esperar hasta el 22 de noviembre para poder ver En llamas, la segunda parte de Los juegos del hambre. Personalmente, el tráiler me ha puesto los pelos de punta. No solo por la carga que parece que van a darle a la película aumentando el protagonismo que tienen las revueltas sociales en esta distopía, sino porque, después de haber leído el libro, me ha dado un escalofrío cuando, al final del tráiler, el presidente Snow dice que tiene que acabar con todos los tributos vencedores. El gesto de los tres dedos que hace el hombre cuando son presentados los ganadores y la musiquilla de cuatro notas del final me ponen los pelos de punta.


Y ya para el 13 de diciembre se espera La desolación de Smaug. Me ha gustado el tráiler pero, una de dos, o Peter Jackson tiene fijación por Legolas o no recuerda que en el libro no tiene protagonismo, porque en el tráiler sale casi en todas las imágenes.


En fin, esto es un poco de lo que viene este año a nuestras pantallas de cine y las buenas noticias van aumentando cada día.

¿Seremos capaces de esperar?

jueves, 6 de junio de 2013

Primera temporada de Doctor Who

Al fin me he atrevido a ver una serie tan mítica como Doctor Who. Sé que he tardado en hacerlo (llego unos veintitantos años tarde), pero más vale tarde que nunca. 


Después de investigar, decidí atreverme con la nueva serie y ver las últimas temporadas (había varias razones, entre ellas, que es más difícil conseguir la primera serie o que parte de ella se ha perdido). Así que conseguí la primera temporada y me puse a ello.


Al principio me pareció algo absolutamente cutre, pero también me sucedió con los primeros capítulos de True Blood y ahora me encanta, así que seguí viéndola.


La idea es genial, un extraterrestre que tiene una nave que puede viajar en el tiempo y en el espacio. Después de conocer el argumento, no me sorprende en absoluto que sea una serie de culto.


Aunque la primera temporada es cutre (sobre todo los efectos especiales), el argumento está bien construido y me encanta que tramas que aparecen en un capítulo puedan continuar en otro capítulo tiempo después.


Otra cosa que me gusta es la solución que han puesto para cuando tienen que cambiar de actor protagonista. En fin, temporadas de Doctor Who hay muchas y es casi imposible mantener al mismo actor durante años interpretando el mismo papel, de modo que alguna explicación hay que dar cuando se cambie. La solución es tan cutre que resulta absolutamente genial.


Continuaré viendo más temporadas y os iré contando cómo avanza la serie. Por ahora, os la recomiendo porque, aunque no tenga la misma intriga que Juego de tronos, The walking dead o Homeland, sí que tiene algo que la hace especial.


No os la perdáis.